16 febrero 2010

Carta a mi inspiración

16 de febrero 2010, Buenos Aires

¿Dónde estás? ¿A dónde te fusite, amiga mía? Me acuerdo cuando me visitabas casi todos los días y hacíamos alguna de las nuestras; la pasábamos tan bien juntas. Eramos como Jenny y Forest, como pan y mantequilla. Pero cada vez venís menos y me pasan tantas cosas. Tengo tanto que contarte.

¿Por qué te fuiste? ¿Pensaste que ya no te necesitaba? Siempre voy a necesitarte, sola no puedo. Te extraño tanto, necesito que vengas a verme, que hagamos una de las nuestras como antes. Dale, compartamos un té como solíamos hacerlo. Te voy a estar esperando.